HUMANIZAR

Gabriela Mistral: “La humanidad es todavía algo que hay que humanizar”.

Cuando uno ve la inercia de este mundo ve un mundo deshumanizado donde manda el dinero, el egoísmo y la mentira.

La mayoría admira a ricos, poderosos y mentirosos.

Y en las comparaciones el generoso, el que dice la verdad, queda mal parado.

En cambio hay pequeños gestos, o grandes, que humanizan el mundo: dar las gracias, ceder el paso, esas sonrisas que contagian… Te haces más humano, nos hace más humanos.

Las armas dictan sentencia, el dinero manda y el poderoso nos quiere hacer sus siervos. Armas, dinero y poderosos nos quieren deshumanizar, convertir en robots.

Nos controlan, monitorizan, nos dan pan y circo, y una pantalla en la que vivir.

Las farmacéuticas trata de hacernos dependientes y las drogas nos permiten huir de la realidad.

Oigo a los de la mesa de al lado:

-He trabajado en Abu Dabi y ganaba mucho, pero la vida solo era trabajo, me sentía como su esclavo.

Recuerdo de un partido de fútbol en Arabia, donde un jeque salía con su látigo para pegar a un futbolista que había fallado un gol.

Si le dan latigazos a un futbolista, que no harán con un trabajador en una obra o una empleada doméstica que trabaja en sus casas.

El látigo, la esclavitud, la deshumanización. Me decía un amigo argentino que la izquierda con su ética y principios siempre estaba en desventaja. Pues los otros sin escrúpulos pueden permitirse todo.

¿Es por eso que la izquierda en ocasiones utilice la mentira y clientelismo como elementos de supervivencia?...  ¿El fin justifica los medios? ¿No hay más remedio?

Poder y ciudadanía rehúyen de la verdad, quieren oír lo que quieren oír, lo que les interesa, lo que beneficie a su bolsillo y la verborrea invade nuestros oídos.

Se desprecia al mendigo, se menosprecia al parado y se trata por tonto al bueno.

No me subo al carro, sufro y sueño, sufro por la deshumanización de este mundo y sueño con compartir mi vida con humanos de carne y hueso, a los que valoro por su corazón, y no creo en las palabras, sólo en los hechos.

Seguiré siendo humano, seguiré queriendo humanizar un mundo que va por otros derroteros.

¿Crees en la Humanidad? No creo.

¿Crees en el humano? En unos si, en otros no.

En ti sí creo, si has leído este texto. Deseas humanidad, humanizar, cuantos más seamos, mejor será este mundo, alguna mejora conseguiremos.

NO SON TIEMPOS PARA LA LÍRICA

Estoy en una terraza y oigo a unos chavales decir en referencia a Trump, comentario que puede ser extensible a muchos mandatarios: “El obje...