HACER LA PELOTA

¿Qué es mejor hacer la pelota o presionar con mala leche?

Ahora acabo de salir de hacer unos trámites, y gracias a Dios que ha salido todo bien, aún con más paciencia que el Santo Job, haciendo la pelota a los funcionarios a fin de que me ayudaran en aquella odiosa burocracia.

Al salir me acordé de una experiencia que tuve en Londres, donde como emigrante que llegaba a otro país con una mano delante y otra detrás, me querían dar una patada. Y una funcionaria hindú después de llevar todos los papeles me respondió: “No tienes pasaporte británico, no puedo hacer nada por ti”.

Soy una persona tranquila, pero la empecé a gritar, insistiendo ella en que me fuera…

Como suele pasar quien peor trata a los emigrantes son los propios emigrantes.

Estaba detrás de mí el Doctor Saho, un personaje de película. Un viejecillo africano de Gambia, que había sido ministro allí y que sabía cómo iba la cosa…

-No te cabrees, no grites nunca. En este país siempre “Please, thank you”… Has la pelota… Y si en un sitio no te hacen caso busco otro.

¡Qué recuerdos de mi maestro africano en suelo londinense! ¡Cuántas conversaciones! ¡Cuántos cafés! (él es musulmán y no bebe alcohol).

A esos cafés se apuntaban John, un inglés polifacético que nos encontramos en la biblioteca, el cual no encajaba en el sistema, y pese a tener dos carreras y hablar 5 idiomas, además de haber vivido en varios países, entre ellos España, le dieron una discapacidad como enfermo mental, cobrando el máximo de pensión más el pago del alquiler de la casa donde vivía.

Para que no la líen gorda, los ingleses pagan lo que sea a los diferentes, locos o a aquellos que no encajan en su mundo, esto daría para un libro.

Él me decía que si quería triunfar en Inglaterra tendría que ser más inglés que los ingleses, y me ponía como ejemplo al Greco, que siendo griego, ya en España, fue el más español de los españoles.

El caso es que desde que el doctor Saho me dio ese consejo, cuando voy de papeleo, me armo de paciencia, y no paro de decir gracias y por favor… Y si no lo consigo en una ventanilla, voy a la siguiente.

Ahora me acuerdo de Luis Aragonés, un maestro como el Doctor Saho, y según fuera el árbitro o le metía presión o le hacia la pelota.

Recuerdo un reportaje donde a un árbitro que le gustaba que le hicieran la pelota, Pajares Paz, no paraba de decir el Sabio de Hortaleza a sus jugadores:

-Manolo, hazle la pelota.

-Hacedle más la pelota.

-Señor Pajares ¿Pongo aquí el balón?

-No paréis de hacerle la pelota…

Es que hay a tantos y a tantos que les gusta que les hagan la pelota.

En la vida profesional de uno, ve tantos pelotas, y no les ha ido mal… Pero… ¡Qué asco! No los aguanto.

Pelota con los de arriba, tirano con los de abajo… ¡Qué asco!.. No los aguanto.

Cuidado con los pelotas, nunca darán la cara por ti, son interesados, venden a quien sea, son malos…

Mejor perderlos de vista una vez que los has encontrado.

2 comentarios:

  1. Cervantes: “No pidas a quien pidió, ni sirvas a quien sirvió”

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  2. Jean Paul Sartre: "La sociedad premia la obediencia y castiga el pensamiento libre".

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