SE FUE, SE FUE

¿Por qué se ha ido? ¿Por qué nos ha dejado? ¿Por qué ha muerto? Se ha ido, SE FUE…

FALTA PASIÓN. No quería vivir más, simplemente quería descansar. Necesitaba un cambio, se aburría, no aguantaba la monotonía, ni soportaba a la gente junto a la que respiraba.

FÍSICO. El corazón, el cerebro, el alma se agotan, se colman o no pueden llevar el ritmo que queremos llevar, AMÉN. Los músculos, las rodillas, los huesos, la espalda son distintos a los 20, a los 30, a los 40, los 50, los 60, los 70… Cuando el cuerpo diga basta tendremos que buscar nuevos trabajos, nuevos ritmos, nuevas actividades…

Cuando la memoria desaparece, la mente se llena, los valores se desquebrajan y la confianza desaparece. Nos tenemos que resetear, aprender nuevas cosas, conocer gente diferente, paladear la esencia y decir no a lo que no nos apetezca.

¿Se ha ido? ¿Qué comentamos? ¿Cómo actuamos? ¿Cuál es nuestra reacción?

Nunca se habla mal de los muertos ¿Para qué? Malo o bueno, ante todo respeto. Algunos son eternidad, por lo que hicieron, por lo que siguen siendo, por la semilla que dejaron, porque SIEMPRE LOS VAMOS A RECORDAR…. Otros se van y dejan mucha paz, han dañado y han coaccionado tantas vidas, han hecho tanto mal... Muchos se alegran de que ya no va a poder seguir haciendo mal.

Suelo ir a un bar en la que se creó una NECROLOTO, se apuesta por quien será el próximo malo en morir, suelen ser personajes odiados por todos.

Al tiempo de dejar un trabajo, me encontré con un ex-compañero gallego, el cual en vez de dejarlo pidió un cambio de sitio.

-¿Qué es de ti? Preguntaba por ti y se hacía un silencio sepulcral. Cuando se pronuncia tu nombre, todos callan, nadie responde.

Creo que tendrían remordimientos de conciencia, aunque lo pienso mejor, y creo que son gente sin conciencia. A lo que añadió el gallego:

-Menos mal que salimos de allí, lo saben mejor estas (iba con su mujer y sus hijas). Estábamos en la cuerda floja, pagaba el estrés que tenía con quien menos lo merecía, mi familia…

Es muy típico hablar mal de quien no está, y trabajadores muy productivos o muy buenos antes, ahora que se han ido dicen que son malos, son una autentica calamidad según los que quedan. ¿Por qué? ¿Motivación? ¿Para qué no se vaya nadie?¿O decir que los mejores somos los que estamos?...

Cuanta hipocresía, cuanta falsedad, ahora que me voy podrás pensar en quien soy, me podrás poner verde, me podrás olvidar, o quizás habré podido dejar huella…

Hay puntos y seguidos, pero esto es un punto y final… Final de un capítulo, aún hay más vida, aún queda por escribir, somos como un libro abierto que no tiene por qué acabar………..